Personal técnico de la empresa tuvo a cargo el plan de trabajo que contempló la limpieza profunda de líquidos y sólidos, la energización del tablero eléctrico y la instalación de una bomba de impulsión provisoria, lo que permitió restablecer su operatividad.
Actualmente, Aguas Rionegrinas avanza en la gestión de compra de dos nuevas bombas definitivas, que serán incorporadas próximamente para garantizar el funcionamiento óptimo y sostenido del sistema.
La puesta en marcha de este pozo permitirá aliviar el caudal del colector sudeste y favorecer la conexión de la nueva red cloacal del barrio Don Rodolfo, beneficiando a las familias de la zona y mejorando la eficiencia del sistema de saneamiento urbano.